jueves, 26 de marzo de 2015

Unboxing: Las freebies del crowfounding de las TGG [Raging Heroes]


TGG, tres letras que son el acrónimo de Toughest Girls of the Galaxy -las Chicas más Duras de la Galaxia, para los que no hablen el hereje -el nombre con el que bautizaron los franceses de Raging Heroes a su primer y muy exitoso crowdfounding.
Ahora que van a lanzar una segunda campaña de crowdfounding -empieza hoy mismo, 25 de marzo -que graciosamente han llamado TGG2 quedándose calvos, me han llegado cortesía de los chicos de Raging Heroes, las freebies del mecenazgo.

Porque uno, que nunca anda boyante y tira siempre a lo más barato, eligió el modo de envío de recibir todas las miniaturas al final, de modo que hasta que no estén todas, no hueles nada.
Y bueno, el tema es que si no me equivoco, debería de haber estado todo enviado, de acuerdo a la planificación inicial, para febrero/marzo de 2014... un año de retraso lleva, que no está mal, no está nada mal. Pero bueno, estas cosas son así, lo que les honra es que a los mecenas nos han ido informando al dedillo de cómo iba la cosa, mandándonos montones de fotos, de bocetos, etc... aparte de que a lo largo de todo este tiempo han ido habiendo ampliaciones, porque han ido presentando nuevas figuras que se quedaron en el tintero durante la campaña... en resumidas cuentas, que me han ido sangrando a lo largo de estos casi dos años de espera, porque sus figuras molan tanto que:

¡Por favor que alguien me esconda la cartera!

Y los de Raging Heroes, conscientes de que ya es mucha tortura, máxime cuando se han lanzado con otro proyecto y hace unos meses empezaron a vender al público parte de las miniaturas creadas gracias a nuestro mecenazgo, nos han mandado, a modo de aperitivo, las freebies sin coste adicional... Y como es de bien nacidos ser agradecidos, aquí va el desembalado de este primer envío:

"Oh lalá, un colis de la France!".
Un montón de cosas en un paquete muy pequeño.
La prueba del delito, el anuncio de la nueva campaña.
Unas útiles instrucciones para darles la puesta a punto a las miniaturas de resina.
En el albarán, la lista de las 14 figuras de que se compone el envío.
El paquete me pareció sorprendentemente pequeño, pero es que el espacio está muy bien aprovechado.
Arriba las más corrientes, tipo suboficial, abajo otras más tipo comandante.
Comparativa rápida entre Svetlana "Light of Freedom", con Sasha, uno de mis soldados de Valhalla y con uno de mis partisanos, de factura más moderna.
Las mascotas, una por cada uno de los ejércitos, muy graciosas ellas.
Podéis observar que las figuras están perfectamente proporcionadas.
Aunque pretenda resultar simpático, la idea de un niño soldado no es santo de mi devoción, pero bueno. 

Haré entradas más exhaustivas cuando empiece a meterles mano, así a bote pronto puedo decir que:

  • La resina empleada tiene pintaza. Es cierto que en los caso en los que he podido elegir -en las freebies, por ejemplo, no -he elegido el metal, por nostalgia si queréis, pero en todo caso la resina con la que trabajan es muy buena.
  • No hay defectos evidentes, tales como burbujas y demás en las figuras y hay relativamente pocas rebabas, así que genial.
  • El material parece relativamente más elástico que otras resinas con las que he tratado, lo que minimiza el riesgo de rotura.
  • Las figuras están muy bien proporcionadas... lo que sin embargo, como puede observarse en la comparativa, representa un pequeño problemilla a la hora de encuadrarlas en ejércitos peor proporcionados... o digamos de proporciones deliberadamente más exageradas.
  • Los detalles, los rasgos de las caras, son en muchos casos muy sutiles, lo que va a suponerme todo un reto estar a la altura a la hora de pintarlas... creo que en esto influye mucho que hayan sido diseñadas por ordenador, si alguien hubiese tenido que esculpirlas a mano, la historia hubiese sido otra.
En fin, estoy satisfecho con el envío, espero que no tarde mucho el tan demorado envío final.
Ahora a ver qué tal se me da pintarlas.

Salud!

martes, 17 de marzo de 2015

El ingeniero (II): Primeros pasos con la base [Imperio/WIP]



Como os comentaba en la entrada anterior estoy publicando menos éstas últimas semana, porque también por diversos motivos estoy pintando menos. 
Pero en fin, entre las cosillas en las que he ido trabajando a ratos se encuentra el pequeño proyecto "Ingeniero imperial", que como os avanzaba hace un par de semanas, no iba a ser capaz de evitar colar en la lista de miniaturas que tengo programado pintar este año.

Tras hacer un pequeño croquis de lo que quería hacer (lamentablemente se ha perdido, le ha caído líquido de frenos y se ha borrado, pero veríais que se parece bastante), busqué una base/peana acorde para la representación de la escena que  había diseñado.

Me hice con un taco de madera de roble, oportunamente barnizado en sus caras laterales.
Quería que la escena pareciera rebosar topográficamente el propio marco de la peana; me fascina cuando lo he visto en los trabajos de otra gente y me pareció que era el momento de probarlo.
De modo que tallé una de las esquinas del taco hasta darle la forma deseada a base de formón y lima:

Fig.1: Disponer de una mordaza me hubiese facilitado el trabajo, pero tampoco se dio mal. 

Para darle una mayor pendiente y porque resulta un elemento más fácil sobre el que trabajar, pegué con cola blanca una lámina de poliexpan cortada a medida:

Fig.2: Cubrí las superficies laterales con cinta de pintor para no mancharlas durante el proceso.

Puede observarse que con masilla epoxi se ha preparado ya una superficie lisa y sólida en el emplazamiento en el que irá la figura. He dejado sendos trozos de alambre de acero, aparte de como referencia, para que no se cieguen los agujeros por los que pasaran los anclajes de la figura.

La escena prevé la presencia de un árbol torcido de tal forma que rebase los límites de la escena.
Aquí se muestra el que hice a partir de una ramita de pino. No me acordé de sacarle fotos a los pasos intermedios del proceso, pero la rama supone más o menos la mitad del árbol, el resto es alambre de acero trenzado y recubierto de masilla sobre la que se ha tratado de imitar la textura del árbol.

Fig.3: Primera capa y lavado; aún le queda mucho trabajo.

En esta foto ya se ha instalado el murete que se aprecia en otra imagen mientras esta siendo hecho. Los ladrillos se han tallado sobre su superficie y se ha simulado el encalado desconchado con pasta texturizante comercial:

Fig.4: El ingeniero, a efectos comparativos, alambrado y listo para pintar.

Hecho el muro, me dio por pensar que para cubrir su parte superior, unas tejas podrían no quedar nada mal, así que me puse manos a la obra e hice unas pocas con masilla epoxi, apoyándome en un polígrafo para darles una curvatura adecuada:

Fig.5: Así si se queda sin munición, siempre podrá liarse a tejazos.

En las siguientes fotos se observa el montaje con las tejas ya colocadas. Para fijarlas tiré de técnicas puramente albañileriles, pegote de masillas y asentarlas con unos golpecitos:

Fig.6: La raíz está simplemente sobrepuesta para ver como quedaría.

Como podéis apreciar, no las ha fijado todas, me reservado para incrustarlas en la decoración del suelo:

Fig.8: La cosa va avanzando, va avanzando...

Ya solo restaba... pues hacer que un trozo de madera con poliexpan y un par de cosas pegadas, pareciera lo que tiene que parecer.
De modo que cubrí toda la superficie de la base con masilla texturizante, sobre la que esparcí y/o incrusté piedras de diverso grosor, las dos tejas reservadas y la raíz del árbol, abriéndose camino por el terraplén.

Fig.9: Homogeneizado esto va pareciendo otra cosa, ¿verdad?

En la masilla fresca aproveché para fijar el árbol, cuya base se había previamente taladrado para instalar un anclaje de acero.

Fig.10: Base lista para empezar a pintar.

Y ¡Voilà! esto es todo de momento, espero que la entrada os haya resultado amena e instructiva. 
Muy pronto, los siguientes pasos hasta dejar la base terminada.

Salud!

P.S.: Como siempre, estoy abierto a vuestros consejos y observaciones. Igualmente si tenéis alguna duda sobre alguno de los pasos que os he mostrado o queréis regalarme un jamón, seréis más que bienvenidos.

domingo, 8 de marzo de 2015

Cañón órgano oldhammer [Enanos]


Domingo, dominguete... trato de sacar más entradas a la semana, lo juro por Valaya, pero siempre se me acaba yendo el goblin volador al cielo y no me resta más que honrar el domingo como ya veis, en fin...
Que tampoco es que esté siendo muy prolífico estas últimas semanas, pero sí que he avanzado un poco con el proyecto "Ingeniero imperial". Durante la semana es muy probable que publique una entrada con los primeros pasos de la peana.

Como decía, no he pintado mucho estos días, pero he querido sin embargo desempolvar unas figuras pintadas hace mucho años, entre otras cosas para estimular a los noveles pintores a que no se desanimen y sigan dándole al pincel.
Yo empecé a pintar con 14-15 años, por aquél entonces, ni había tantos medios (materiales, didácticos...), ni yo tenía dinero (y no es que ahora tenga mucho, pero algo más, sí), así que empecé a pintar un poco de cualquier manera, aprendiendo de forma autodidacta a partir de los consejos básicos que me brindó mi primo, consumado pintor oldhammero.

El cañón órgano fue de lo primero que compré y pinté. No estoy seguro de si fue una compra premeditada o de si lo compré como muchas otras cosas, en una tienda de mi barrio que liquidó sus miniaturas al 50%, pero el caso es que en 5º edición siempre lo metía, tenía unas reglas bastante buenas y era muy barato (cortesía de una errata de la que no tuve noticia, hasta que  el señor Endakil lo comentó no hace demasiado, hay que joderse... XDD):


Pinté la máquina de guerra en primer lugar y la verdad que demasiado bien quedó para la mierda de material que tenía... y la poca técnica:

¡Si los oros los pinté con una purpurina cutre de tienda manualidades! En fin...

De la misma época es el pintado del artillero cachas de los fardos:


Aunque no fue el primero de los tres que pinté, sí es el único que ha pervivido hasta ahora... Digamos que el ingeniero estaba "tan bien pintado", que le hice darse un bañito en alcohol y lo volví a pintar algunos años después, sabiendo ya lo que me hacía:


El último fue el artillero del atizador, una figura que francamente me encanta:


Estas dos figuras a lo sumo les daría un poco más de contraste, unas luces un poco más extremas de acuerdo con la moda actual. El artillero forzudo... bueno, es posible que lo repinte en un futuro, ya lo veréis. En cuanto al cañón, esta vida no me da para tanto... y además tengo otro para pintar:


Me llegó en un lote. Está hecho pedazos (literalmente).Es de 3º/4º edición, final de los 80'. Y me encanta.
Quiero restaurarlo y hacerlo operativo, en principio no hay fecha. La verdad que el modelo me gusta más que el chatillo de 5º edición, que nunca ha sido de mis miniaturas favoritas, no sé vosotros qué pensaréis:


Lo usé bastante en batalla en 5º edición (gracias a la errata) y debo decir que de mi anterior vida de jugador no tenía experiencias sobre su uso en 6º edición, porque le cambiaron sustancialmente las reglas y eso me disgustó... Pero fue un cabreo absurdo, su uso es ahora más sencillo y más razonable, y estratégicamente me parece un elemento interesante, aparte de que introduce un elemento de azar divertido. Así que ahora que he vuelto, suele tener un sitio asegurado en mi lista de ejército.

Salud!

Os dejo un poco del Folk Metal de los italianos Furor Gallico como inspiración (Ojo, que viene con guturales!)
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